Rezum®, una innovadora terapia que permite manejar esta patología de forma mínimamente invasiva y ambulatoria, a través del orificio natural de la uretra, mejorando notoriamente la calidad de vida de los pacientes. Somos pioneros en incorporar esta terapia en la Región de Coquimbo.
Rezum® utiliza la energía natural almacenada en unas pocas gotas de agua para reducir el tamaño de la próstata y lograr una desobstrucción de la vejiga. La mayoría de los pacientes comienzan a sentir alivio de los síntomas a sólo dos semanas después del tratamiento y el beneficio máximo puede presentarse a los tres meses. No se realizan incisiones, se puede realizar mediante anestesia local y sedación, y la mayoría de los pacientes regresan a sus actividades habituales en unos pocos días. Además, permite conservar la función sexual.
Los pacientes candidatos a este tipo de cirugía, son aquellos mayores de 50 años, con una estimación del peso de la próstata de entre 30 y 80 cc. y que buscan aliviar los síntomas de la próstata evitando los efectos secundarios de los medicamentos, conservando su función sexual.
También está indicada en aquellos pacientes que tienen contraindicación para cirugía formal por padecer de alguna otra enfermedad, por ejemplo uso de anticoagulantes.
Rezum® NO reemplaza la indicación de cirugía formal.
Es preciso tener en consideración algunas recomendaciones:
Proporciona una mejora significativa y sostenida de los síntomas de la próstata, y de la calidad de vida de los pacientes que padecen HPB hasta 5 años después del procedimiento
Tratamiento ambulatorio que eliminan la complejidad de un entorno hospitalario y no requiere de ningún tipo de implante permanente
Capacidad para tratar próstatas con hiperplasia de los lóbulos laterales, zona central y/o lóbulo mediano
Conserva la función sexual
Baja tasa de re-tratamiento de procedimientos del 4.4% hasta por 5 años
Habitualmente usted será dado de alta sin sonda vesical, pero en ciertas circunstancias podría no ser así, en este caso se le comunicará cuando debe retirar la sonda vesical.
Después de una cirugìa puede presentar:
Aunque es un procedimiento bastante seguro, como toda cirugía tiene algunos riesgos asociados.
Sangre al orinar (hematuria), la cual puede persistir durante un par de semanas después de la cirugía. En ocasiones la formación de coágulos obliga a un sondeo vesical para su evacuación.
Infección urinaria que requiere de un tratamiento con antibióticos.
Sangrado importante que necesite de transfusiones. Sangrado tardío que puede requerir de re-hospitalización. Estrechez de la uretra que puede requerir de re-intervención futura.
Tome los medicamentos recetados al alta. Intente realizar su vida con cierta normalidad. Camine sin realizar esfuerzo físico o levantar peso durante 4 semanas.
Puede tener relaciones sexuales después de 4 semanas. Tras la cirugía usted puede presentar eyaculación retrógrada, que es una condición en la cual el semen no sale a través de la uretra durante el orgasmo, en su lugar entra en la vejiga para posteriormente ser eliminado con la orina, esto no modifica el deseo sexual ni la calidad de las erecciones.
Evite el estreñimiento. Vigile su temperatura.
Dr. Marcelo Alvear - Urólogo
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